Qué pueden hacer los reguladores para acelerar la penetración del almacenamiento de energía

Julio 8, 2020

Por: Cristóbal Riego – Reportero de energía, Cono Sur- BN Américas.

El avance del uso de baterías en las redes eléctricas de Latinoamérica necesita un adecuado acompañamiento regulatorio que considere el valor que esta tecnología aporta a la red.

Esta es una de las conclusiones de una entrevista por correo electrónico que BNamericas sostuvo con Paola Hartung, directora de asuntos regulatorios de AES Gener, en el marco del Energy Storage Summit Latin America organizado por Solar Media.

En la región, Colombia prepara una licitación por su primer sistema de almacenamiento en baterías en conectarse a la red, la tecnología atrae cada vez más el interés de los inversionistas en toda la región.

En Chile, la regulación está haciendo los avances necesarios para que esta tecnología, que añade flexibilidad tanto a la red de transmisión como a los proyectos individuales por una fracción del costo que tendría construir nuevas líneas, pueda contar con un marco adecuado para su desarrollo, señala Hartung.

BNamericas: ¿Cuáles considera que son los factores clave para que el almacenamiento de energía pueda crecer a buen ritmo en Chile y el resto de Latinoamérica? ¿Qué elementos están pendientes?

Hartung: En Chile, los sistemas de almacenamiento de energía (SAE) fueron incorporados explícitamente en la Ley General de Servicios Eléctricos el año 2016 para aportar con la seguridad, suficiencia y eficiencia sistémica. Es decir, están habilitados para participar en todos los mercados existentes en Chile.

En otros países esto no es así, pero sí se puede, con voluntad regulatoria, aprovechar los servicios o atributos de los SAE, tal como lo está haciendo Colombia, donde ante una necesidad de eficiencia sistémica decidió incorporar esta solución para un problema específico de transmisión.

Una vez que el regulador o el operador de la red decide evaluar técnica y económicamente un SAE para solucionar un problema, se ha avanzado gran parte del camino. Luego, los agentes del mercado deberían aprovechar la oportunidad de negocio.

Existen mercados que son más conservadores y lentos; sin embargo, la innovación y la caída de los precios tanto de las renovables como de los SAE están ejerciendo mucha presión para que las evaluaciones sean eficientes y eficaces.

BNamericas: ¿Qué oportunidades abre esta incorporación del almacenamiento a mayor escala y qué beneficios puede traer para las compañías, los clientes y la red eléctrica?

Hartung: En un principio solo se consideraba a los SAE para servicio de calidad de red o servicios auxiliares o complementarios. Recientemente, la conveniencia de implementar los SAE a mayores escalas ha permitido dos cosas muy importantes: liberar restricciones de transmisión de grandes corredores de energías renovables [como los casos de Alemania, Australia, Chile] y gestionar la energía horaria a inyectar a la red como parte de las mismas centrales renovables, extendiendo su presencia horaria en el sistema con precios más competitivos, evitando vertimientos y dando la posibilidad de estar presente en las horas de demanda máxima de los sistemas.

Estas dos características de los SAE de gran escala permiten la expansión de los mercados en base solo a energías renovables y en el corto a mediano plazo dejar a la generación térmica como prestador de servicios de seguridad o backup solamente. En ambos casos, la implementación es cortísima comparada con la construcción de nuevas líneas de transmisión o nuevas centrales de gran capacidad, y es además muy amigable con el medioambiente.

BNamericas: ¿Qué acciones pueden tomar los gobiernos de la región para acelerar la adopción del almacenamiento y la transición energética en general?

Hartung: Cuando existe la firme voluntad de descarbonizar o bien de diversificar la matriz y hacerla más resiliente e independiente, los SAE y las energías renovables son la solución más costo-eficiente y de menor impacto ambientalmente.

Si la regulación es muy rígida o no permite espacios a la interpretación normativa, la oposición de los incumbentes puede ser un obstáculo duro de sortear; sin embargo, creo que las evaluaciones serán tan competitivas que no quedará más alternativa que adoptarla, antes o después que la regulación se adapte.

En Chile, hace 11 años se instaló el primer SAE de mediana escala para prestar control de frecuencia, y la regulación tuvo que interpretarse. Hoy está entrando en operación el primer SAE en una central hidroeléctrica renovable y la regulación está justamente en proceso de adaptación para poder capturar todo el beneficio que esa dupla tecnológica brindará al sistema.

AES implementó un proyecto piloto de mediana escala, 10MW de SAE de tecnología BESS con capacidad para almacenar 5 horas. Trabajó con el regulador en las evaluaciones de los beneficios de incorporar nuevas tecnologías y finalmente se complementó la normativa existente para remunerar el atributo de capacidad. En cuanto a los sistemas de transmisión, también los SAE han quedado habilitados por normativa (actualmente en proceso de aprobación final). El paso siguiente es evaluar y competir contra otros proyectos y ver si los SAE superan a la transmisión convencional para solucionar problemas puntuales que posee la red eléctrica chilena este año.

BNamericas: ¿Qué aspectos regulatorios deben ser considerados por las autoridades para dar las correctas señales de incentivo y para permitir que el almacenamiento alcance su potencial?

Hartung: Considerando que las políticas o voluntades energéticas de los países deben ir en línea no solo con la eficiencia económica, sino que también con la disminución de los aportes a los gases de efecto invernadero, la resiliencia y la independencia de insumos fósiles, es muy simple: permitir que los SAE participen en los mercados sin discriminación tecnológica y definir una señal económica adecuada, que permita su desarrollo y capturar el valor que tienen, tanto en la eficiencia del sistema como en objetivos de políticas.